Zárate Bico Da Ran 2023

Zárate Bico Da Ran 2020. Elaborado con uvas 100% Albariño de los mejores viñedos del Salnés. Las uvas son vendimiadas por la mañana para retener el máximo de aromas y frescura. El mosto escurrido se fermenta en frío utilizando levaduras que resaltan los aromas primarios varietales. Una vez completada, el vino se estabiliza en frío y se filtra para preservar los aromas y frescura. El vino se embotella en una bodega en Meis, Pontevedra. Nota de cata Zárate Bico Da Ran 2020: Visual: Color amarillo pajizo brillante, con reflejos verdosos. Olfato: Es un vino refrescante, como morder una manzana jugosa madura. Tiene una hermosa y refrescante acidez. Es un vino afrutado de gran intensidad aromática. Gusto: Cítricos con notas de hinojo y maracuyá. En el paladar es afrutado pero fresco, con un intenso carácter vegetal y notas exóticas. Zárate se encuentra en el Val do Salnés, dentro de la DO Rias Baixas, en el corazón de Galicia. La familia continúa al frente de los viñedos, muchos de ellos centenarios, con los que elaboran vinos artesanales, fieles a la tierra y expresión viva de Galicia. Eulogio Pomares es la séptima generación de la familia que continúa con la tradición vitícola de sus viñedos. Pomares se formó en Burdeos antes de incorporarse al negocio familiar. La propiedad cultiva en estos momentos 6,54 hectáreas que se reparten en 11 parcelas en las parroquias de Sisán y Padrenda. Estas dos parroquias del son reputadas por sus terrenos pobres y soleados, ricos en arenas graníticas, que son considerados la cuna del Albariño. En Zárate sólo se utilizan tratamientos de fitoterapia y de azufre y cobre, nada de insecticidas, y no laborean sus parcelas desde 1994, lo que ha hecho florecer las leguminosas y la flora autóctona devolviendo al suelo su equilibrio natural. Con las cepas de pie franco más antiguas de la región en su finca El Palomar, Pomares lleva a cabo una selección masal para hacer nuevas plantaciones. Su visión se basa en expresar los diferentes “terroir” de sus albariños y otras variedades tintas autóctonas como Caíño Tinto y Espadeiro. Sus vinificaciones son totalmente artesanales y poco intrusivas, dando lugar a vinos frescos, minerales y de gran capacidad de guarda incluso para los blancos.